Tegucigalpa – La jefa de vigilancia del Hospital Escuela Universitario (HEU), Roxana Araujo, informó que en total 60 pacientes sospechosos de tener leptospirosis han ingresado a ese centro asistencial en lo que va del año.
La funcionaria detalló que son 60 pacientes los que han ingresado al hospital en las 28 semanas que van del presente año, de los cuales el 80 por ciento son sospechosos de leptospirosis del Distrito Central y solamente dos han sido confirmados a través de las pruebas de laboratorio.
Explicó que la leptospirosis es una enfermedad bacteriana producida por la bacteria leptospira que generalmente se adquiere a través de aguas contaminadas y cuando las personas tienen alguna lesión o herida en la piel, la bacteria puede entrar al cuerpo a través de esa herida produciendo la enfermedad. “No es más que agua contaminada con orina o excremento de ratas”, acotó.
Detalló que generalmente la leptospirosis comienza con fiebre, malestar general y dolor en las pantorrillas, pero si las personas se auto medican y dejan que continúe, la enfermedad avanza a la afección de órganos importantes como los riñones y el hígado y cuando ya llegan al hospital, vienen con un color amarillento en la piel o en la conjuntiva de los ojos que es la ictericia.
Advirtió que si la enfermedad no se trata de forma temprana o a tiempo, la persona puede fallecer porque necesita de antibióticos para su tratamiento.
Indicó que en la temporada de lluvias, principalmente en la zona de los mercados, en las cañeras o en el oficio de los albañiles donde se hacen mezclas con agua, es donde más cuidado se debe de tener.
Asimismo, recomendó que si una persona tiene fiebre, malestar general o dolor en las pantorrillas, debe acudir inmediatamente debe acudir al médico inmediatamente.
Por otro lado, Araujo indicó que el país es afectado actualmente por tres epidemias como el dengue y la chikungunya, donde se venía observando un incremento de los casos, sin embargo, durante el fin de semana hubo un descenso en el área de pediatría.
Detalló que en el caso del dengue la incidencia ha sido de 82 por ciento, mientras que en chikungunya en un 77 por ciento en menores de cinco años, lo que ha generado que las salas de pediatría se vean atestadas de pacientes.
