En ese sentido, aseveró que los sectores empleador y trabajador, sabían que si se llegaba a una inflación de un ocho por ciento, de inmediato había que sentarse a dialogar y negociar un nuevo salario mínimo y si se llegaba a un cuatro por ciento, también había que sentarse a dialogar.
Sin embargo, la inflación interanual llegó a 5.4 por ciento, por tanto se ratifica el acuerdo logrado en 2012 que implica aplicar un incremento de 6.4 por ciento promedio, aunque hay que hacer otros ajustes en base a las categorías.
Añadió que únicamente está pendiente convocar para la semana entrante, el tema referente a los componentes que hacen retener el poder adquisitivo del salario donde intervienen instituciones como Banasupro, Seguro Social, INFOP y otros que contribuyen a la canasta básica familiar, por lo que en el tema salario ya no hay discusión.







