“Con respecto a los medicamentos que se venden libremente en los mercados y en los buses, se han interpuesto varias denuncias, sin embargo pareciera que no hubiera autoridades conscientes de los problemas que sufre el pueblo hondureño”, lamentó.
Sostuvo que los medicamentos circulan sin ningún registro sanitario, inclusive cuando son naturales “les ponen hasta aserrín en una capsula, sin saber lo que está tomando el paciente”.
Recordó que cuando estuvo al frente de la presidencia del Colegio Químico denunció varias las anomalías.
“Las autoridades se hacen de oídos sordos y no les prestan la atención debida, pueden intoxicar a una persona o malversar con el precio de los medicamentos”, reiteró.
Indicó que el producto en su mayor parte es proveniente de El Salvador.
Agregó que tiene conocimiento que la diazepam de 5 mililitros la venden en canastas por lo que exigió que esto no siga sucediendo.
“Con los medicamentos no se puede jugar, solo el médico puede recetar el producto, y solo el Colegio Químico puede garantizar un producto”, indicó.
En ese sentido, hizo un llamado a la Policía Municipal, autoridades de Salud y Policía Preventiva para que decomisen el medicamento y lo destruyan.







