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Filtraciones de “El Cajón” continúan y sin fecha para su reparación

Tegucigalpa – Los daños a la mayor obra pública de Honduras, vital para el mantenimiento de su estilo de vida, vienen acumulándose desde hace siete años y hasta en los próximos dos meses se espera iniciar el proceso de licitación para reparar las filtraciones que afectan las rocas, túneles y la misma cortina de la represa hidroeléctrica de El Cajón, informó un alto funcionario de la estatal Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE).
 

Los trabajos de reparación se encuentran abandonados desde hace siete años y aumenta el costo a medida que avanza el tiempo.

La ENEE se encuentra sin recursos, y el Gobierno con dificultades financieras.

Rafael Arita, director administrativo de El Cajón, informó que esperan que en marzo próximo se realice la licitación pública para adjudicar a la empresa que se encargaría de reparar las filtraciones de agua que vienen afectando a las diversas partes de la imponente obra.

El Cajón, oficialmente conocida como la represa hidroeléctrica “Francisco Morazán”, es la principal obra pública y cuya capacidad de generar 300 megawatts de energía permite mantener estable el suministro de electricidad a los millones de hondureños, así como a su industria, comercio y sector agrícola que generan los cientos de miles de empleos.

Pero la importancia de la obra, vital para el estilo de vida hondureña, no ha sido atendida por los últimos dos gobiernos, ya que, según confeso Arita, las filtraciones datan desde hace siete años.

El responsable del mantenimiento de la obra denunció que de no hacerse las reparaciones prontamente los daños serán mayores y más elevado será su costo de rehabilitación, según señaló al noticiero TN5 de la corporación Televicentro.

Desde inicios de su gestión en la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE), el entonces gerente Roberto Martínez Lozano, informó que se llamaría a una licitación pública internacional para reparar las filtraciones cuyo coste estimaba en ese momento en 200 millones de lempiras.

Martínez Lozano pasó dos años al frente de la institución y nunca se concretó la licitación para conceder los trabajos de reparación.

Ahora la tarea corresponde al actual gerente Emil Hawitt Medrano que había llamado a licitación, pero la misma se adjudicó a una empresa, pero al final fue declarada desierta por impugnaciones de varios sectores.

Para ese momento las obras de reparación costaban ya 400 millones de lempiras.

Ahora Arita sostiene que los costos de reparar la cortina y evitar las filtraciones pueden rondar entre los 600 y 800 millones de lempiras (30 a 40 millones de dólares).

Pérdidas

Pero Arita recordó que a pesar que los costos han aumentado, las pérdidas para la ENEE son mayores, ya que las filtraciones son tan masivas que la salida de agua hacia el río deja pérdidas económicas a la ENEE por unos 40 millones de lempiras anuales al no generar la electricidad.

El funcionario indicó que toda esa agua filtrada se desperdicia, a pesar que la obra tiene la capacidad para generar energía eléctrica.

Y eso que Arita no contabiliza que la energía no generada por el desperdicio del agua debe adquirirse a los generadores térmicos privados, que venden la electricidad a un precio mayor que el producido por la ENEE por la vía hidroeléctrica.

Arita indicó que en El Cajón están listos para las obras de reparación de la cortina de agua, aunque se debe esperar la decisión del gobierno y la gerencia general para que se determine que empresa se encargará del proyecto de reparación.

El funcionario recordó que una vez iniciados los trabajos, los mismos se prolongarán hasta por cuatro años para dejar la cortina reparada, ya que son obras muy especializadas que nos e hace en corto tiempo.

Problemas financieros

El problema es que la ENEE cerró el año 2012 con un déficit de más de 4,000 millones de lempiras, lo que obligó al Gobierno inyectarle recursos.

Asimismo, el Congreso Nacional tiene paralizado la aprobación de su presupuesto para el 2013, hasta que la empresa no presente un plan de financiamiento a la misma y evite que el Gobierno esté destinando recursos para su rescate financiero.

Además del problema de El Cajón, la ENEE debe hacer frente a la escasez de recursos para continuar con el proyecto de la represa de Patuca III que se pretende construir en Olancho.

La empresa “El Cajón” es una de las obras de ingeniería más importantes de Centroamérica. Se comenzó a construir el 15 de junio de 1980 y se concluyó en 1985; el costo total de su construcción fue de 775 millones de dólares con una capacidad para generar 300 megavatios y durante muchos años abasteció mas del 100% de la demanda energética del país, ahora se estima que aporta el 35%.

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