Zaragoza (España) – La actriz alemana Nastassja Kinski (Berlín, 1961) reconoce que durante su prolífica carrera temprana hubo varias ocasiones en las que, a menudo, no la «tomaban en serio» a causa de su juventud y considera que si no hubiera sido por ‘Paris, Texas’, quizá no estaría viva.
Conocida por sus papel protagonista en esta película de 1984 de Wim Wenders y en ‘Tess’ (1979) de Roman Polanski, Kinski habló con EFE antes de recibir, en Zaragoza (norte), el Premio Saraqusta a su trayectoria en el cine de temática histórica, en el festival que lleva ese nombre, especializado en películas históricas.
Pregunta: ¿Cómo sienta recibir este homenaje a su carrera?
Respuesta: Estoy muy agradecida, especialmente en este momento de mi vida. Nosotros, los actores y actrices, hacemos películas, pero luego también llevamos una vida normal. Y ahora, este premio está conectado con un momento difícil para este mundo, y para mí también. (…). A veces el cielo está oscuro, llueve, pero luego sale el sol.
P: El premio reconoce especialmente su labor en ‘Tess’, que le valió un Globo de Oro.
R: ‘Tess’ fue muy importante para mí. Yo era muy joven y me dio una plataforma donde tomarme en serio, estoy muy agradecida por ello. Pero todas mis películas han sido relevantes para mí (…), cada vez que trabajamos es una oportunidad.
P: Era muy joven, ¿no se sintió desprotegida en una industria tan asfixiante?
R: A menudo, sentía que no me tomaban muy en serio, pero gracias a ‘Tess’ pude cargar con una gran responsabilidad y eso me gustó. Es fácil tomar a una chica joven e intentar que haga lo que tú quieras.(…). Pero yo fui muy afortunada. Cuando hice ‘Tess’ me rodeé de muy buenas personas, comenzando por el productor, que normalmente está muy infravalorado. Él fue el capitán de ese barco.(…). Fue una experiencia única.
P: Luego llegó Coppola…
R: Yo estaba muy nerviosa porque pensaba en qué pasaría si fracasaba, si él no quedaba satisfecho. Pero Coppola nos dio un buen entrenamiento(…). Yo entrené un tiempo en el circo para hacer esas escenas (…). Incluso Gene Kelly vino a ayudarnos con las coreografías. Fue como estar en el País de las Maravillas.
Y luego hice ‘El beso de la pantera’, que fue una película extraña, pero hay detalles en ella que no olvidaré jamás. También, el hecho de trabajar con animales, con David Bowie, Giorgio Moroder, quien hizo la banda sonora… Adoro la música, soy una melómana, así que estaba todo conectado.
P: Se convirtió en todo un icono muy rápido.
R: Yo era relativamente joven. Después de todo eso tomamos la famosa fotografía de la boa con Richard Avedon. La vida es como una cadena, no creo que hubiera posado en esa imagen si no hubiera rodado ‘El beso de la pantera’. (…) Cambié completamente de imagen de la noche a la mañana. Y eso me ayudó a experimentar con diferentes aspectos de mi trabajo, (…) y aprender que puede que no siempre tengas el éxito que conseguiste antes, pero siempre te dan una oportunidad.
P: Con ‘París, Texas’ su carrera vivió un nuevo renacer. Han pasado ya cuarenta años, pero sigue muy presente.
R: Es la historia de una mujer, un hombre y su hijo. Disfruté mucho de trabajar con Harry Dean Stanton, (…). Ahora, miro atrás y pienso qué hubiera pasado si no hubiera conseguido esa oportunidad. Quizá no estaría viva, u otra cosa. Creo mucho en el destino y esos momentos también lo forjan.
P: Jane es un personaje lleno de tristeza y nostalgia con su pasado, ¿se vio reflejada en ella a la hora de interpretarla?
R: En la película, dentro de esa pequeña habitación, estaba con mis pensamientos, con algunos hechos de mi vida, por supuesto. Ese cuarto le hacía sentir a Jane muy sola y le forzaba a recordar y sentir todo lo que le pasó. Cuando las personas discuten todo el tiempo no pueden encontrar realmente las causas de lo ocurrido. Pero si toman un poco de distancia, se echan de menos, lo reflexionan y ambos lo sienten, hallan un anhelo para querer arreglarlo.
P: Wenders ha sido, de algún modo, su director fetiche…
R: Sí, lo conozco desde que tenía 12 años(…). Cuando él pronuncia una palabra, sé exactamente qué quiere decir. Juntos hicimos tres películas; es el único con el que he rodado varias veces.
P: ¿Cree que la industria cinematográfica ha avanzado lo suficiente para proteger a las actrices que, como usted, comienzan siendo tan jóvenes?
R: Ni siquiera en la vida hay suficiente protección para los niños y los jóvenes. Pero en el cine sí, claro, lo necesitamos. Pienso que, hoy día, las jóvenes actrices son mucho más fuertes, pueden decir que no quieren algo o negarse a hacer un papel. Quizá yo no era tan fuerte o era más tímida o lo que fuese. Pero creo que vivimos en un momento bueno para que la gente pueda alzar su voz (…). Cuantas más hablen, más se ayudarán entre ellas. EFE